miércoles, 19 de julio de 2017

¿POR QUÉ HABLO TANTO DE ELLA?

Hipoglucemia… sí, otra vez la “hipo”!!! Te preguntarás, ¿por qué habla tanto de ella? Creo que escribo tanto acerca de ella porque, esos episodios son los que me causan más miedo, angustia (siempre y cuando esté consciente y no en una hipoglucemia profunda o un episodio nocturno), frustración y también vergüenza!  Sí, es vergonzoso que alguien a mis treinta y siempre …Ok, treinta y siete!… tenga que ayudarme algunas veces a salir de ella.

Pero ella, la hipoglucemia, llega en los momentos y lugares menos indicados: a punto de abordar tu avión, manejando rumbo a tu casa, justo después de haber comido, en el segundo receso del colegio, cuando estás tomando un baño, el sábado de reunión familiar, durante la cena de navidad, en un concierto, en un paseo hacia una isla, etc., etc… Es sorpresiva y demandante, hay que atenderla de inmediato, o atenerte a sus consecuencias. Algunas veces llega sin previo aviso, hipoglucemia sin síntomas, le llaman; algunas otras, te da tiempo de reaccionar.

Estos últimos meses sin el uso de mi MCG (Medidor Continuo de Glucosa), por motivos económicos, ha sido un poco más complicado para mí. Aún con mis mediciones de glucosa durante todo el día, me siento a ciegas y sin lentes!  Y todo se complica cuando las personas a tu alrededor no saben detectar o no te conocen lo suficiente para darse cuenta que hay algún cambio.  De hecho, puedo afirmar y decir, sin temor a equivocarme, que muy pocas de mis amigas de años, me conocen en un episodio hipoglucémico.

Sin embargo, esto no significa, que no deben estar informados para saber cómo actuar durante uno de ellos. En los párrafos siguientes, hay una breve descripción de cómo se manifiestan.
Los síntomas adrenérgicos, son los que se manifiestan cuando el cuerpo intenta mantener los niveles de glucosa normales: palidez, sudor frío, irritabilidad, hambre, temblor, nauseas, taquicardias y ansiedad.

Los síntomas de hipoglucemia originados en el cerebro, ya que el sistema nervioso resiente la falta de glucosa, llamados neuroglucopénicos: falta de concentración, confusión, mareo y debilidad, dolor de cabeza, sensación de calor o de frío, alteración de la conducta, alteración de la memoria, marcha inestable, falta de coordinación, lapsus de conciencia y convulsiones.

En mi experiencia personal, cada episodio hipoglucémico es distinto: la mayoría de las veces soy consciente y pongo manos a la obra; pero en otras, me pongo seria, muchas me he puesto a discutir (incluso por no querer algo dulce para contrarrestar la situación), confundida, en otras siento náuseas o que pierdo la fuerza para estar de pie, etc.

Es importante señalar que en ocasiones los comportamientos de un estado de hipoglucemia, pueden ser confundidos con “borrachera”; por lo cual el estar al pendiente ante cualquier cambio de comportamiento en una persona con diabetes de cualquier tipo, es básico. Tambien, es importante para quienes tenemos diabetes, traer con nosotros algo dulce que nos ayude a pasar por ese episodio de hipoglucemia.

A continuación les escribo la información para el tratamiento más común contra la hipoglucemia:

Tratamiento                                                                                                                                  
  1. Consuma 15-20 gramos de glucosa o carbohidratos (3-4 tabletas de glucosa, 1cdita.miel, ½ vaso de refresco no dietético, etc.)
  2. Vuelva a revisar sus niveles de glucosa después de 15 minutos
  3. Si la hipoglucemia continua, repita
  4. Una vez que la glucosa en la sangre vuelve a la normalidad, coma algo pequeño si su próxima comida o merienda es dentro de una hora o más horas.
.                                                                                                                                                 
http://www.diabetes.org/es/vivir-con-diabetes/tratamiento-y-cuidado/el-control-de-la-glucosa-en-la-sangre/hipoglucemia.html?referrer=https://www.google.com.mx/


jueves, 6 de julio de 2017

EL "MERO" DÍA DE SAN JUAN

El pasado “mero” día de San Juan, o sea 24 de junio; fue mi cumpleaños número 37!!! Sí cumplí treinta y siete, y no puedo evitar pensar que, durante 24 años, mi fiel acompañante ha sido la Diabetes Tipo 1... He vivido con ella sin darnos un break la una a la otra, he pasado más tiempo con ella, que con mis propios padres...

No es una relación perfecta y llena de armonía, sino todo lo contrario. Todos los días son distintos y como una montaña rusa: unos han sido muy difíciles y complicados, otros casi perfectos; pero, eso nos ha permitido conocernos y saber qué hacer "en caso de..."

También ella me ha permitido conocer y acercarme a personas maravillosas, quienes viven o tienen hij@s con la misma condición; con algunos he vivido experiencias únicas, como mi primer campamento de diabetes; y otros me han aportado sus experiencias, conocimientos e información importante, así como la oportunidad de escribir y compartir un poco de mí.

Pero también creo que ella me ha aportado, la educación y el conocimiento en Diabetes Tipo 1, junto a un equipo médico correcto y capacitado, a quienes cada día atesoro más, fueron la base para que todo esto mejorara. Aún falta mucho camino por recorrer y conocimiento por adquirir...  Pero lo importante es que cada año puedo contar más y más experiencias y también velitas a mi pastel, por supuesto, contando carbos... Este año de chocolate! ;)